La clave de tu abundancia

¿Alguna vez viste a alguien manifestando eso que vos deseás —el trabajo, la pareja, el viaje— y sentiste un pequeño pinchacito en el pecho?
Esa mezcla entre alegría por el otro… y un leve “¿por qué yo todavía no?”

A todas nos pasa, aunque cueste admitirlo.
No porque seamos malas personas, sino porque eso que se nos activa es pura información.
Es una parte de nosotras misma pidiendo ser vista.

Cuando la comparación se activa

Durante años me pasaba al mirar a mis mentoras: mujeres que admiraba profundamente, que publicaban libros, viajaban, crecían en sus proyectos… y yo me quedaba con esa sensación interna de “¿por qué a mí todavía no?”
Me comparaba, me exigía, me sentía menos capaz.

Y entendí algo esencial: cada vez que admiramos o juzgamos a alguien en exceso, estamos viendo una parte de nosotras que no reconocemos.

— Lo que admirás demasiado, te muestra tu potencial dormido.
— Lo que juzgás demasiado, te muestra tus propias heridas no resueltas.

Ambos reflejos son oro.

El otro como espejo

Cuando sentís celos, envidia, incomodidad o juicio frente al éxito, la belleza o la felicidad de alguien, no te castigues.
En lugar de pensar “qué horrible sentir esto”, podés decirte:

“Gracias por mostrarme lo que todavía no reconozco en mí.”

Esa incomodidad no es enemiga. Es una guía.
Te está diciendo dónde aún hay trabajo interior por hacer: dónde hay inseguridad, miedo o creencias limitantes sobre tu propio merecimiento.

La sombra no es algo malo

La “sombra” es todo aquello que no podés ver de vos misma, pero que se proyecta a través de los demás.
Cuando la integrás, empezás a expandirte.
Porque en vez de vivir separada —viendo al otro como “distinto” o “mejor”— empezás a reconocer que todo eso también habita en vos.

Cada persona que te genera una reacción fuerte, sea positiva o negativa, está cumpliendo una función sagrada: mostrarte lo que está listo para ser reconocido, sanado e integrado.

Del juicio a la integración

Probá esto hoy mismo:
Cuando alguien manifieste algo que vos también deseás, y sientas ese “pinchacito”, decí internamente:

“Gracias por mostrarme la abundancia disponible para mí.”

Al hacerlo, pasás del juicio a la gratitud.
De la separación, a la unidad.
Y en ese gesto, empezás a reconocer que todo lo que admirás en los demás también está en vos.

Ese es el verdadero comienzo de la abundancia: recordar quién ya sos.

El verdadero trabajo

Manifestar no se trata de hacer más, sino de reconocer más.
De mirar adentro, en lugar de seguir buscando afuera.
Cada vez que transformás el juicio en comprensión, estás expandiendo tu conciencia.
Y cuando expandís tu conciencia, se expande también tu capacidad de recibir.

Si esta información resonó en ti...

Si te gustaría cerrar 2025 en paz, con claridad y abundancia que puedas sostener con calma y disfrute...

Te espero en mi nuevo programa 👇👇👇 

💫 21 Días para Desbloquear tu Abundancia y Certeza

Si querés liberarte de la comparación, fortalecer tu certeza y abrir tu canal de abundancia, quiero invitarte a mi nuevo programa. 

Una programa de reconexión para limpiar tu energía, fortalecer tu certeza y abrir tu canal de abundancia natural antes de iniciar el nuevo año.

Durante tres semanas te acompañaré a soltar lo viejo, elevar tu frecuencia y reconectar con el flujo de luz y guía que ya habita en vos.

Vas a manifestar desde un espacio de expansión interna profunda, abriendo tu corazón y tu mente para recibir la abundancia que tu alma está lista para experimentar.

Si estás leyendo esto en tiempo real, aprovechá la preventa exclusiva con valor bonificado y bonus especiales.
 

👉 ¡Sí, quiero cerrar el año en paz y abundancia! >>

¡Ahí te espero si resuena en tu corazón vamos a compartir 3 semanas de mucha conexión, mucha certeza, abundancia y milagros!

Que tengas un día maravilloso.

Con amor, 

Flor Gubba